Entregados los resultados de la Prueba de Transición (PDT) para el ingreso a la Educación Superior, dos jóvenes usuarias del Hospital de Día InfantoAdolescente Arica demostraron que es posible compatibilizar un proceso terapéutico en Salud Mental, al obtener un buen resultado que les permitirá seguir una carrera universitaria, además de ya estar ad portas del alta en el dispositivo de salud. ¿Cómo fue este proceso?
G y O, las iniciales de sus nombres que usaremos para mantener la confidencialidad, no tuvieron un proceso simple. Sin embargo, Stephanie Williams, directora del Hospital de Día InfantoAdolescente Arica, ejecutado por CORFAL en convenio con el Servicio de Salud Arica, destacó que pese a las dificultades “pudieron demostrar que es posible” y por eso el destaque de sus experiencias, frente a lo cual las muchachas accedieron a una entrevista para contar cómo lo lograron.
Primero, ¿esperaban este resultado? ¿Que ambición tenían previamente? G es la primera es responder de forma automática diciendo que sí, que esperaba este resultado aunque siente que se preparó realmente solo los últimos dos meses. Las circunstancias terapéuticas influyeron, pero “sentí el apoyo” del Hospital de Día, declara.
Por su parte, O siempre fue hábil en las matemáticas y se preparó desde Primero Medio, por lo que los resultados obtenidos los siente acorde a su esfuerzo. Sin embargo, destacó que el ultimo año fue de preparación de forma casi exclusivamente online, lo que para ella más que una dificultad fue una oportunidad porque pudo tener un profesor especial y eso le permitió reforzar más sus días de estudio, que incluían sábado y domingo.
Un tema importante para G era la comunicación familiar: «peleaba mucho con mi mamá», relata G, una situación que afectaba aun más tanto su tratamiento como su vida escolar. En eso, ambas jóvenes destacan el rol de la psicóloga del programa, que les ha ayudado a adquirir herramientas de contención, manejo de frustraciones y otros temas que le eran difíciles de trabajar antes. Ahora “puedo ayudar en contenerme” relata O, con una confianza de tener herramientas que sin dudas le fueron también útiles en la preparación de la prueba y en los procesos de espera de resultados, que pueden resultar aún más abrumadores con diagnósticos que acentúan la ansiedad. Pero O señala que las herramientas funcionaron y aprovechó el periodo de espera para “ordenar mi pieza, caminar al Mall, ordené mis cosas” y así sentir que más que un periodo muerto, era un periodo provechoso: «aprendí que los días son cortos y hay que aprovecharlos», dice con su voz acelerada pero clara.
G también vio resultados del proceso terapéutico, no solo en ella misma sino también en su mamá. Siente mayor apoyo familiar, ya que su progenitora también ha asistido a talleres para la comunicación familiar y poder mejorar la relación con su hija, un enfoque que hoy destaca como algo que la tiene contenta y tranquila, aún con un panorama incierto ya que sin resultados, no sabe finalmente donde estudiará y por ende, donde vivirá los próximos años de su vida. “Igual lo veo confuso”, responde cuando le consulto sobre cómo observa esta nueva etapa en la vida.
Sin embargo, cuando le pregunto sobre qué le diría a alguien de su edad que esté por vivir lo mismo que ella este último año, el desafío de un tratamiento de Salud Mental junto con la preparación para la prueba de admisión a la Educación Superior, G dice muy tranquila “que no tengan miedo. Venir para acá me hizo motivarme”, destaca que todo el equipo del Hospital Día la hace sentir confiada y mejor consigo misma, lo cual permitió que pudiera vivir su proceso terapéutico y su preparación escolar con mayor concentración en su objetivo. “Les diría: estás en un buen lugar para recibir todo el apoyo”, complementa O, haciendo recordatorio en la importancia del autocuidado y de la constancia para ir superando episodios difíciles en la recuperación de la salud: “de a poquito este proceso se va aliviando”.
Las imágenes de esta nota son un mural realizado por usuarios y usuarias del Hospital de Día InfantoAdolescente Arica